El caldero pélvico es el centro creativo y erógeno de la mujer. Cuando estamos en contacto y tenemos una relación amorosa con él, podemos acceder a un caudal de energía creativa, sexual y regenerativa infinita, así como a un flujo de sabiduría ancestral, otorgándonos placer y salud.
Pero, como nunca nos enseñaron, vivimos desconectadas de nuestros órganos sexuales y (no) reproductivos, no sabemos cómo darles el lugar en nuestra vida que merecen, aparecen -y se reiteran- a lo largo de nuestra vida, patologías y problemas del salud relacionados con ellos. Como por ejemplo dolores menstruales, quistes, miomas, fibromas, endometriosis y tumores.
Pero no sólo problemas en el cuerpo físico, también pueden aparecer problemas a nivel emocional-espiritual, como baja autoestima, poca aceptación del propio cuerpo, relaciones tóxicas, falta de creatividad o motivación para llevar a cabo nuestros proyectos personales.
Por eso, les quiero compartir en este texto algunas prácticas simples para mantener el caldero pélvico limpio y sano.
Y así poder acceder a la magia que reside en nuestro cuerpo-espíritu !
•Reconectar y percibir nuestro ciclo menstrual & amar nuestra sangre
Si aún no estás al tanto de tu ciclo menstrual, si no sabés en qué fase estás, o no tenés tanta idea de qué te pasa en cada fase del ciclo, podés empezar a percibirlo llevando un diario lunar. En esta entrada te tiro un par de tips para empezar a llevar un diario.
Una vez que empieces a conectar y percibir tu ciclo, te propongo que le des un lugar especial en tu vida, a los días que sangras.
Esto quiere decir que te escuches, que te des un mimo, que hagas realmente lo que tenés ganas de hacer, y que al menos por esos días, no sigas voces externas. Te escuches a vos.
También es super importante mantener una gestión natural del ciclo. En lo posible utilizar la copita menstrual y/o toallitas de tela, para que nuestro cuerpo no tenga que trabajar el doble limpiando los químicos que tienen estos productos.
Acá hay un poco más sobre este tema.
Dándote el tiempo de descansar si te sentis molesta o cansada, sin tomar analgésicos que tapen los síntomas.
• Poner en palabras la propia necesidad y el deseo
No sé que viene primero en este caso (onda el huevo o la gallina), pero empezar a reconocer lo que vos necesitas y no lo que otros esperan de vos y poder ponerlo en palabras, decirlo en voz alta. Primero decírtelo a vos (o escribirlo) y después compartirlo con la gente que necesitas que lo escuche y lo sepa. Esto mantiene muuuuy en movimiento tu energía creativa, y la sanidad en tus caldero pélvico! Y a la vez, esta limpieza y movimiento, genera aún más conexión con tu voz interior y tu deseo. Entonces es como un círculo hermoso de auto-aceptación y amor propio que vale la lucha comenzar!
• Conocer y aprender a nombrar nuestros órganos sexuales y (no) reproductivos
Si todavía no (te) conocés, no (te) investigás, te invito a que comiences a hacerlo! Podés empezar usando un espejo, y mirandote. O tocándote. Y si no te sentís cómoda aún con hacer esto, podés empezar por conocer los órganos y partes del cuerpo que están en esta zona del cuerpo (el Útero,las trompas uterinas, los ovarios, el cervix, canal vaginal, vulva). Podés leer al respecto de ellos, podés dibujarlos, visualizarlos, aprender dónde están, para qué sirve cada uno...
Recomiendo como libro de cabecera, Manual Introductorio a la Ginecología Natural de Pabla Perez San Martín!
• Volver a movernos, sentarnos y vestirnos libres
Desde chicas nos educaron y nos llenaron la cabeza para que habitemos nuestro cuerpo de cierta manera. Escuchamos frases como "no te toques ahí" "sentate derecha" "cruza las piernas", etc. Todo esto generó que no podamos acceder a un movimiento intuitivo y sano de nuestra pelvis. Lo que provoca, como dice Casilda Rodrigañez, un Útero espástico y contraído, que al moverse solo produce dolor.
El Útero es un órgano rodeado de haces musculares, por lo tanto es importante aprender a moverlo.
Te propongo que un rato, unos minutos por día, o al menos por semana, investigues qué movimientos pélvicos te hacen bien. No hace falta poner música y bailar árabe (aunque es super recomendable!), simplemente abri las piernas, relajá las rodillas, y mové la cadera. No pienses en niguna forma en concreto, dejá fluir al cuerpo...que él te lleve. Al principio va a ser raro, o incómodo tal vez, pero dejate llevar ! Si te ayuda podés poner música :)
Probá usar ropa más suelta, que no te apriete la panza, sobre todo los días que estás sangrando. Dale lugar al caldero pélvico para que se expanda y se acomode. Dale entidad y lugar físico en tu cuerpo para que abra su potencial.
•Ejercitarlo a través de ejercicios específicos para fortalecer el suelo pélvico
En los círculos de mujeres siempre hacemos estos ejercicios, por ejemplo los ejercicios Kegel (esos que tenés que simular que retenés el pis y lo soltas, una y otra vez alrededor de 20 veces).
Otro: acostada en el suelo apoyás al sacro y levantas las rodillas, dejando apoyadas las plantas de los pies. Solo haciendo fuerza con las plantas y no con los glúteos o el abdomen, empezá a levantar el sacro. Investigá formas y figuras con tus movimientos pélvicos!
O, dejando las piernas en el suelo, formá un diamante juntando las plantas de los pies. Relaja las piernas, y visualizá la energía correr por tu cuepro.
•Auto-masajes
Hacerse auto-masajes es hermoso! Podés hacerlo con un poco de aceite de sésamo que es calentito. Investigate con las manos, fijate qué tipo de contacto necesitás hoy. Un poco más intenso, o tal vez sólo una caricia...explora(te) !
A mi me gusta hacerlo antes de irme a dormir, ya acostada ;)
• Palabras de amor !!! Uffff qué importante este !!! Fijate de qué manera te hablás a vos misma en tu mente...de qué manera le hablás a tu cuerpo...las palabras y pensamientos tóxicos, generan un daño real e importante en nuestro cuerpo y su capacidad de regenerar y brindarnos salud. Fijate si podés, concientemente, hablarte con más amor, mirarte con más amor y aceptación. Tal vez al principio cueste, o algunos días sean más díficiles que otros, pero es un hermoso ejercicio de vida.
•Rituales: meditaciones e intenciones
Encontrá un espacio del día, o del mes, para respirar y estar más presente en tu cuerpo. Al menos unos minutos, o unos segundos. Respira y percibí esa respiración, cómo recorre tu cuerpo, cómo hace lugar, como relaja tensiones. A mi me gusta mucho- y me ayuda tanto!- intencionar. Por ejemplo, todas las lunas nuevas, o el día 01 de mi ciclo menstrual (cuando empiezo a sangrar) anoto una intención para ese ciclo que comienza. Algo que quiero dejar atrás, o algo que quiero darle la bienvenida en mi vida. Funciona como una brújula.
En los círculos de mujeres también trabajamos con meditaicones específicas para el caldero pélvico, pero ya respirar consciente y presente en el cuerpo, ayuda un montón!
•Tener orgasmos
Sola o acompañada ! Pero tomate tu placer como algo importante y no prescindible!
La oxitocina nos regulan el cuerpo y el sistema hormonal.
•Tomar agua
Durante el día, trata de tomar mucha agua. Que sea natural, no fría. Y mejor si es 30 minutos antes, y 30 después de las comidas (para no molestar a la digestión). En algunas tomas, visualizá como te riega de amor el Útero, somos como plantitas :)
•Alimentación conciente
Sin ánimos de dar cátedra sobre qué comer, todo lo que sea inflamatorio para el cuerpo, va a ayudar con el malestar del caldero pélvico. Por eso es mejor no consumir (al menos no frecuentemente!), harinas, ni azucar refinadas, lácteos y carnes (por su dificil digestión y por los altos químicos que le introduce la industria a los animales al explotarlos para el consumo, ni hablar del sufrimiento de otra especie!).
En lo posible, consumir alimentos orgánicos. Ya que los otros poseen muchos agrotóxicos que son dañidos para el cuerpo.
El ayurveda es una ciencia-medicina que acompaña la ciclicidad de la mujer y su conexión con la naturaleza. Por eso es una herramienta hermosa para tratar todo tipo de patologías y malestares a través de la alimentación y hierbas naturales.
•Practicar Yoga
Para abrir las caderas!
Mis asanas preferidas son Baddha Konasana, Balasana, Utkata Konasana, Supta Virasana.
Siempre con amor y mucha paciencia para no lastimarnos. Respirando lenta y profundamente por la nariz.
•Naturaleza
Cuando puedas, tengas tiempo y ganas, salí a caminar por algún lugar lejos (o cerca, pero lejos emocionalmente) de la ciudad y del asfalto! Caminá descalza en la tierra, y descargás así un poco de tensión.
•El tener información nos distancia del miedo y por ende del dolor
Hay mucha data copada hoy en día sobre estos temas. Lee, investigá, juntate con amigas, hermanas, tías, mamás, abuelas. Preguntales a ellas, sus experiencia, contales las tuyas! Asistí a talleres, andá a círculos de mujeres, a clubes de lectura.
En esta web te comparto, en la sección red de hermanas, libros para acompañarte y empoderar tu camino!
Con todas estas prácticas, seguramente empiecen a salir a la superficie muchas emociones. Placenteras y no tan placenteras, recuerdos, experiencias, pensamientos. El caldero pélvico es nuestro centro emocional, es donde guardamos todas nuestras experiencias emocionales...por lo tanto ponerlo en movimiento va a traer que todo esto se mueva también.
No te asustes! Y abrazá con amor la experiencia. Y si ves que es mucho, buscá ayuda y contención de mujeres que trabajen guiando otras mujeres en este despertar.
Y no dejés de correr la voz! Compartí lo que sabes, lo que aprendés con otras mujeres (y con hombres también!!!).
Así nos vamos empoderando y aceptando entre todxs.
♥ Con amor,
iari
Referencias e inspiraciones
- Textos, charlas y clases en Mujer Pulpo, con Sofía Slobodjanac Parisi.
- Red Moon, Miranda Gray
- Manual Introductorio a la Ginecología Natural, Pabla Perez San Martín.
